¿Qué ver dentro de Cantillana?

Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción

La Iglesia Parroquial de Nuestra Señora de la Asunción, en Cantillana, Sevilla, comenzó su construcción en 1555 bajo la dirección de Juan Pérez Caravallo. De planta basilical con tres naves, destaca su artesonado del siglo XVI y su torre del siglo XVIII, diseñada por Diego Antonio Díaz. El retablo mayor, originario del convento de Santo Domingo de Carmona, es obra de Juan Gatica. En su capilla del Sagrario se encuentra una Inmaculada barroca y una interesante pintura de la Trinidad doliente. Además, la sacristía alberga valiosas piezas de orfebrería y pinturas de artistas locales.

Plaza de los Símbolos Andaluces

La Plaza de los Símbolos Andaluces en Cantillana alberga un monolito en honor a Blas Infante, considerado el Padre de la Patria Andaluza. Aquí, Infante se inspiró para crear el Himno y la Bandera de Andalucía. El himno se basa en el «Santo Dios», un canto piadoso que los campesinos de Cantillana entonaban durante sus labores agrícolas como plegaria para pedir lluvia. Blas Infante, desde su notaría cercana entre 1910 y 1923, escuchaba este canto religioso que le sirvió de inspiración para redactar la letra del Himno de Andalucía.

Plaza de Toros de Cantillana

La Plaza de Toros de Cantillana, inaugurada el 22 de junio de 1905, es una de las más antiguas de la provincia de Sevilla, con capacidad para 2.380 personas. Ha acogido a grandes figuras del toreo como Curro Romero, Paquirri y los hermanos Peralta. Originalmente propiedad de la familia Sáenz de Tejada López, fue adquirida por el Ayuntamiento en 2002. Restaurada en 2003, la plaza también sirve como escenario de eventos culturales. La afición taurina de Cantillana es destacada, siendo cuna de famosos toreros como Manuel Ruiz Manili, triunfador en Las Ventas de Madrid.

Torre del Reloj

La Torre del Reloj de Cantillana, situada en la Cuesta del Reloj, data del siglo XII y originalmente fue una fortaleza militar que formaba parte de la muralla de la zona. En el siglo XVIII se le añadió un reloj de sol en su cara sur, dando lugar a su actual nombre. La torre presenta un escudo con un águila imperial y el castillo de los condes de Cantillana. En el siglo XIX se le añadió el campanario y dos campanas. Recientemente restaurada, se mejoraron sus cimientos y se sustituyó el mecanismo del reloj por uno más ligero.

Antiguo Hospital de Todos los Santos – Centro de Historia Local

El Antiguo Hospital de Todos los Santos, construido en el siglo XV, es un edificio de estilo gótico-mudéjar. Su arquería destaca por los arcos ojivales ligeramente apuntados sobre pilares cuadrados con detalles achaflanados. Originalmente, este hospital servía como lugar de acogida para peregrinos. Actualmente alberga el Centro de Historia Local, donde se exhiben piezas como el impresionante Mosaico de los Delfines, datado en el siglo II d.C., y una escultura de mármol blanco de una matrona romana. El edificio es un ejemplo del uso tradicional de ladrillo y mampostería típicos del arte mudéjar.

Plaza del Caño

La Plaza del Caño, una típica plaza andaluza, debe su nombre a un caño que antiguamente desaguaba las aguas de las viviendas del municipio. Durante la época musulmana, esta plaza albergaba una fuente pública utilizada para el aseo antes de entrar a la cercana mezquita. La plaza, con su encanto tradicional, forma parte del legado histórico de Cantillana.

Ermita del Dulce Nombre de Jesús y Santa Misericordia

La Ermita del Dulce Nombre de Jesús y Santa Misericordia, situada en la Plaza de la Misericordia, tiene orígenes musulmanes, ya que fue una antigua mezquita debido a su ubicación elevada y orientación a la Meca. Reconstruida en el siglo XVI, inicialmente constaba de una sola nave. Destaca por su portada de ladrillo visto y una espadaña con un rosetón de azulejos. En su interior, el retablo del siglo XVIII alberga un Niño Jesús de la Escuela Sevillana y una pintura de la Virgen de la Misericordia. Actualmente, es sede de la Hermandad filial de San Benito Abad.

¿Qué ver en las afueras de Cantillana?

Ruta de los Molinos del Viar

La Ruta de los Molinos del Viar, en Cantillana, es un sendero sencillo de 10,7 km que recorre las márgenes del río Viar, destacando por su belleza natural y los restos de antiguos molinos. Partiendo del puente sobre la A-436, el recorrido, en parte circular, atraviesa paisajes de naranjales y formaciones rocosas, como los Conglomerados del Viar. Entre los molinos más notables se encuentran el Molino del Pajarero, de origen romano, el Molino del Viar y el Molino de Campos, algunos en ruinas, pero con acceso para explorar. Es ideal para caminantes y familias por su fácil acceso y variedad paisajística.

Kayak Río Viar

La ruta en kayak por el río Viar ofrece una experiencia única al recorrer este afluente del Guadalquivir, que fluye de norte a sur atravesando el término de Cantillana. El recorrido permite disfrutar de la belleza de la dehesa de encina y el matorral mediterráneo, hogar de fauna diversa como el milano real, el tejón y el galápago europeo, una especie vulnerable en Andalucía. Zonas como la Zanoria y las Asperillas, con antiguos molinos harineros y una rica vegetación ribereña, brindan un entorno natural ideal para remar y explorar. El acceso es libre desde la carretera A-432.

Cantillana de Sevilla: la cuna del enrejado

Permíteme a mi, Blas Infante, ser tu guía en este recorrido por Cantillana, un pueblo cargado de historia, tradición y belleza natural, que ocupa un lugar especial en mi corazón. Descubrirás por qué este rincón de Andalucía es tan querido y valorado.

Monumentos y fiestas

En Cantillana, la devoción y la historia se reflejan en cada rincón. Pasea por sus calles y déjate maravillar por los azulejos que adornan las fachadas, homenajeando a las dos advocaciones marianas más veneradas: la Divina Pastora y la Virgen de la Asunción. Durante los meses de agosto y septiembre, las fiestas en honor a estas imágenes religiosas llenan el aire de fervor y alegría, siendo declaradas de Interés Turístico Nacional.

Comienza tu recorrido en la parroquia de Nuestra Señora de la Asunción, del siglo XVI, ubicada en la zona conocida como El Palacio. Aquí, además de admirar su arquitectura, podrás disfrutar de unas impresionantes vistas de la Vega del Guadalquivir. En el interior del templo, encontrarás las imágenes de la Virgen de la Asunción y la Divina Pastora, centro de devoción para los cantillaneros.

Sigue explorando hasta la Cuesta del Reloj, donde se alza la Torre del Reloj, símbolo de la localidad, construida sobre los restos de una antigua muralla árabe. Cerca de aquí, la Plaza de la Alameda te mostrará vestigios romanos como piedras de molino y esculturas, recordándonos el profundo pasado histórico de Cantillana.

No dejes de visitar la ermita del Dulce Nombre en la Plaza de la Misericordia. Este pequeño pero hermoso edificio, que sirvió de hospital, alberga la imagen de la Virgen de Belén y otras obras de arte religioso. Continúa tu paseo hasta la Plaza del Llano, donde encontrarás la ermita de San Bartolomé, un edificio del siglo XIV que merece tu atención.

Para terminar tu recorrido por el patrimonio religioso, anímate a hacer una breve caminata de un kilómetro hasta la ermita de la Divina Pastora, situada a las afueras del pueblo. El paisaje que te rodeará en este trayecto es un reflejo de la riqueza natural de Cantillana.

Naturaleza y tradición

Cantillana no solo destaca por su patrimonio histórico y religioso, sino también por su entorno natural privilegiado. Ubicada en la comarca turística Guadalquivir-Doñana, la proximidad de Cantillana con Sierra Morena ofrece un paisaje de contrastes único. El río Viar, afluente del Guadalquivir, añade una nota de frescura y vida a esta tierra.

Para los amantes de la naturaleza y el senderismo, Cantillana es un paraíso. Te recomiendo explorar la zona haciendo senderismo o paseando en bicicleta. Cada ruta te permitirá descubrir la diversidad de su flora y fauna, y la serenidad de sus paisajes.

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